Todos sabemos qué se siente al congeniar con otra u otras personas; una nueva evidencia sugiere que congeniar (en particular me refiero a la habilidad natural de una persona para congeniar con otra/as) juega un rol significativamente determinante en la sociedad.
Unas personas están más naturalmente inclinadas a formar relaciones de congenialidad y otros, a los que suelo llamar “camaleones sociales” suelen adaptar su comportamiento y/o actitudes para sacar provecho de una situación social determinada; detectan sutiles pistas sociales tales como, entre otras, la proximidad o la vulnerabilidad de un gobierno (nacional, provincial o municipal) y las utilizan para alcanzar sus objetivos (técnica de progresión y aproximación acelerada).
Cuanto más frecuentes son las interacciones (si son cara a cara, mejor) aun sin conversar, más tendemos a interactuar para lograr nuestra aceptación…
Viendo lo que se ve, pero también lo que no se nos muestra o se nos quiere esconder detrás de la vorágine cotidiana del clima áspero que nos circunda, de algo podemos estar seguros, y es que en la Argentina después de 60 años de inflación acumulada, defaults, desagios, confiscaciones de ahorros y demás artilugios fiscales y/o políticos, los argentinos no necesitamos conocer el nombre de lo que se practica a diario.
Vivimos al ritmo de impuestos distorsivos, transferencias presupuestarias no previstas, una inflación que corre a un ritmo muy difícil de alcanzar, sueldos que nunca son suficientes porque la vida es cada vez más cara, entes de control desmantelados técnicamente y capturados por grupos de interés, crece la inseguridad, la justicia empieza a dar síntomas de colapso y la educación pública y la salud son noticia casi exclusivamente por los conflictos laborales.
Nuestra Presidente, tan afecta a hablar, en su afán por ocultar la realidad miente sobre el pasado en su historia oficial, miente cuando describe el presente con índices fraudulentos preparados por el INDEC y miente sobre lo que hará en el futuro próximo.
En un ambiente hostil como el que estamos viviendo, Cristina Kirchner cree que bajar la intensidad del conflicto podría ser interpretado como debilidad, por eso redobla la presión y crea nuevos conflictos.
Toda actitud de Cristina esconde siempre una acechanza.
La violencia verbal y la violencia material están unidas por un vínculo psicológico y político que genera el clima ideal para degradar al ocasional adversario político a la categoría de “enemigo”, no reconociéndole ni siquiera el derecho de expresión.
“Que sepa la puta derecha que esto no le va a salir gratis” (Milagro Salas en el velorio de Néstor Kirchner).
El mentor del “Proyecto Nacional, popular y latinoamericano” Néstor “lupo” Kirchner supo dividir, según su interpretación (que heredó y pretende profundizar Cristina) a la sociedad argentina en dos campos antagónicos bien definidos: el nacional y popular; y el antinacional y antipopular.
¿Puede usted hoy escandalizarse si alguien afirma de uno u otro lado que “La Justicia tiene un hedor a venganza de la puta madre que lo parió”?; o que la Corte Suprema de Justicia está integrada por “turros que se reúnen a espalda de nosotros y les pasan sobres con plata” (Hebe de Bonafini).
¿Puede sorprenderlo el hecho de que el guerrillero chileno Sergio Galvarino Apablaza Guerra (al que el Gobierno le concedió refugio el mes pasado para bloquear el pedido de extradición de la justicia chilena para juzgarlo, cuya esposa, Paula Chahín, trabaja en el área de Medios de la Casa Rosada) apareciera caminando detrás del escenario montado por la Corriente Nacional de la Militancia Política y Social?
Ese conglomerado K, reúne en su estructura a los movimientos sociales, al peronismo K, y las agrupaciones de izquierda afines tales como: Frente Transversal, Movimiento evita, MPR, Los Pibes, Octubres, 17 de agosto y JP Descamisados, entre otros.
Explicación oficial sobre la inflación y educación:
“Necesitamos profundizar el modelo inclusivo, social, productivista, y en esto el conocimiento en ciencia y tecnología cumple un rol fundamental” (Graciela Rosso, intendente de Luján).
“Los aumentos se explican por la puja que se da en una economía que está en expansión, que tiene una enorme demanda, producto de haber incorporado a millones de argentinos al mercado del trabajo, millones de argentinos al sistema jubilatorio y a los beneficios de la asignación universal por hijo”.
“La suba de precios es un problema que afecta solo a la clase media”
(Amado Boudou).
Otros puntos de vista:
“Cuando tenemos un problema de precios, no hay ninguna posibilidad de que los pobres no se vean afectados por ese aumento” (Alejandro Arlía).
“El nivel de precios de los alimentos (valor de la canasta básica alimentaria) está poniendo en riesgo la eficacia de la Asignación Universal por hijo” (Artemio López, consultora Equis).
“Las fuertes subas de precios que se concentraron en los alimentos, volvieron a castigar más fuerte a los consumidores de menores ingresos” (CEMA entidad en la que Amado Boudou fue profesor)
“La suba de precios es el crecimiento de la pobreza y el incremento de la desigualdad social” (Consultora Equis)
Puedo afirmar, sin temor a equivocarme, que en el pensamiento y en los sentimientos de un hombre o mujer siempre están reflejadas las virtudes de su madre.
“No se puede dar un paso atrás.
No se pueden regalar las ideas ni la calle”. (Néstor Kirchner).
“Voy a destruir a los militares; voy a poner de rodillas a la Iglesia y hasta que no pisotee a los oligarcas del campo, no pienso parar aunque el país se vaya a la mierda” declaración de Néstor Kirchner en círculo de amigos (todavía no tenía en la mira a papel prensa, ni a Clarín-Nación).
Eros, el amor, hace que Psique, el alma, vuele.
Por esa razón el amor es un eterno insatisfecho que encuentra a menudo en algunas fantasías una buena ocasión para alimentarse.
…”Yo, que voy a ser genia, ¡ojala! Si fuera una genia haría desaparecer a algunos como hacen los genios” (Cristina, del discurso en la Biblioteca Nacional cuando se celebraba la firma del contrato para la construcción del Museo del Libro y la Galería de la Lengua).
“Qué bueno sería que hubiera en la residencia de Olivos algo así (bañadera con jacuzzi) a cuántos podría ahogar en tamaña bañadera” (Cristina).
No podrán convencernos de nada por el solo hecho de habernos reducido al silencio…
En azul y blanco,
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